Proyecto de Extensión: “Construyendo Herramientas con jóvenes en contextos de encierro"
Se realizó un encuentro de balance
Desde hace casi dos años el proyecto es coordinado por estudiantes y docentes de las Facultades de Ciencias Agrarias y Forestales y de Humanidades de la UNLP. Posee una perspectiva multidisciplinaria que apunta a la construcción conjunta de saberes técnicos- productivos y organizacionales para que los jóvenes en situación de encierro puedan descubrir su posición como sujetos activos ante la sociedad.
Del balance participaron: estudiantes de nuestra Facultad, estudiantes de la Facultad de Humanidades pertenecientes al colectivo de educación popular Atrapamuros y docentes que llevan adelante el proyecto, junto a los responsables institucionales centro cerrado y 4 jóvenes del proyecto. Acompañaron este importante día de balance la Vicedecana Irene Velarde y la secretaria de bosques del CEAF, varios estudiantes y docentes con ganas de conocer este trabajo, todos se fueron presentando cada uno contando su rol en el proyecto.
Algunas de las reflexiones en torno al balance de este año fueron:
- A partir de este proyecto se pudo dar cuenta del aporte en la batalla académica al concepto de rol profesional y a nuestro plan de estudios, como así también el para qué y con quienes trabajamos desde la Facultad.
- Este proyecto nos permitió reconocer una realidad compleja, distinta y cotidiana, producto de una desigualdad social y una falta de distribución de las riquezas, de la cual son los sectores más vulnerados de nuestra sociedad los quienes más los sufren las consecuencias de este sistema.
Uno de los jóvenes del Centro Cerrado de Orientación Agropecuaria (COPA) leyó una carta, que decía: “Soy un pibe más, igual que todos. Me gusta leer, escribir y escuchar. Pienso que todos los días aprendo algo nuevo, así como en la calle acá adentro también. Me gusta mucho ir al taller de Agronomía por los pibes y las pibas que vienen, le ponen mucha onda. A lo primero pensaba que íbamos a plantar plantas y fue, pero no fue así, ellos me enseñaron a pensar de otra forma, a razonar bien, a pensar en el futuro, que quiero hacer, de que voy a vivir. Que el saber y aprender te lleva a razonar. Tenemos muy buenos debates, de muchas cosas.”
Desde la coordinación del COPA se felicito la tarea y valoró el trabajo semanal que se sostiene gracias al compromiso que tienen quienes integran este proyecto, del cual participan 15 jóvenes del Centro Cerrado y día a día son más los que quieren sumarse a participar del taller.
Todos los que asistieron al balance coincidieron en la importancia de fortalecer el proyecto, de sumar otros cursos de la Facultad y grupos de trabajo que puedan proyectar acciones junto a los jóvenes.
El desafío para 2017 será trabajar y reflexionar sobre las situaciones post encierro en donde los jóvenes quedan expuestos a situaciones de exclusión de los sistemas laborales formales, articulando con otras unidades académicas e instituciones provinciales.
Por último, una de las integrantes del Proyecto comentó que “todos cotidianamente nos formamos para nuestra tarea desde una perspectiva de educación popular, aquellos que soñamos con una Universidad para el pueblo, quienes nos planteamos una extensión que sea un ida y vuelta de con la comunidad, vamos trabajando desde una educación más amplia, una educación popular con diversas estrategias pedagógicas. Nos seguimos convenciendo de que para transformar la realidad, compleja y desigual es necesario aunar esfuerzos, ir a los territorios, ampliar la mirada, así como dice Galeano que Mucha gente pequeña, en lugares pequeños, haciendo cosas pequeñas, puede cambiar el mundo.”